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miércoles, 15 de enero de 2014

Si es que a los números se les hace decir lo que uno quiere

Sigo regularmente el blog de Antón Uriarte, un científico que niega la importancia que se le está dando al CO2 en el calentamiento que hemos vivido en el último siglo. Como otras veces os he dicho, este incremento está cuantificado en 0.8 grados.

Hay otro sector científico que está firmemente convencido de que no es así, que el CO2 junto otros gases de efecto invernadero (metano fundamentalmente) son los causantes de este incremento y de lo que venga. Y hay otro sector de la ciencia, no menos importante en cuanto a número y calidad, que no lo tienen claro. Y luego están los interese económicos en cada uno de los bandos

Pero luego estamos la masa aborregada que tomamos partido por uno u otro sector sin tener ni jodida idea de lo que estamos hablando, y normalmente sustituimos el intercambio de opiniones por el berrido camellil. Pero bueno, así ha sido y así siempre será. La masa aborregada somos muy útil para la gerontocracia dirigente

A lo que voy. Al blog de Uriarte. Este señor es un firme defensor de la utilización del carbón como fuente para producir electricidad  y del empleo del la fractura hidráulica para aprovechar vetas de metano. Esto es ni más ni menos que el fracking. El hombre da sus argumentos. Y la masa sólo podemos hacer dos cosas, o creérnoslos o no, ya que base científica para refutarlos o apoyarlos normalmente no la tenemos.

Como os digo, el fracking. Dice Uriarte que las emisiones de CO2 han bajado en EEUU desde que se utiliza esta técnica. O sea, y es cierto, romper metano para hacer electricidad genera menos CO2 que romper carbón. A igualdad de energía producida, el metano produce menos CO2. Y pone una gráfica para apoyar sus argumentos que es la siguiente


La gráfica es la que es. Es de tendencia descendente y la proyección a futuro también. Y esto es así desde que se hace fracking. Que bien ¿no?

Pues no. Fijemonos mejos, en el título. “Emissions per cápita”. Vaya, esto puede cambiar un poco la gráfica. Vamos a ver. Vamos a google y tecleamos “Evolución demográfica en EEUU”. Y la primera entrada es a la wiki. De ahí sacamos esta tabla

1950
151 325 798
+14.5%
1960
179 323 175
+18.5%
1970
203 211 926
+13.3%
1980
226 545 805
+11.5%
1990
248 709 873
+9.8%
2000
281 421 906
+13.2%
2010
308 745 538
+9.7%
2013
316 159 818

Ahora cogemos Excel, ponemos una columna con los años, otra con la población y la tercera con las emisiones per cápita que las obtenemos de la propia tabla del blog de Uriarte y la cuarta multiplicamos la gente por las emisiones (columna dos por columna tres). Queda algo así:

año
poblacion
emision per cápita
emision global
(tonel. P. cápita)
(toneladas)
1.950
151.325.798
14,8
2.239.621.810
1.960
179.323.175
15
2.689.847.625
1.970
203.211.926
18,2
3.698.457.053
1.980
226.545.805
20
4.530.916.100
1.990
248.709.873
20
4.974.197.460
2.000
281.421.906
20,2
5.684.722.501
2.010
308.745.538
18
5.557.419.684
2.013
316.159.818
16,5
5.216.636.997


Y el gráfico ahora es así:



Vaya, resulta que la tendencia tan clara de bajada ahora es menor. O sea, una derivada casi plana. Resulta que el fracking tampoco es la panacea para bajar las emisiones globales, ya que estas dependen no solo de lo que emitimos cada uno sino de cuantos somos. Nuestro gozo en un pozo

Claro, luego aparecen esos grupitos que claman por la “extinción voluntaria de la especie humana para salvar el planeta”. Los hay desqueaceraos y juntapalabras.

Pero vuelvo al principio. A que a los números se les hace decir lo que uno quiere. Y vale tanto para la ciencia, como para la contabilidad empresarial, como para el deporte. Para todo. En función de lo que les interese nos hablan en porcentajes o en cifras absolutas. Y todo para manejarnos. Pero lo más gracioso es que lo consiguen amigo, con las masas aborregadas de las que formamos parte hacen lo que quieren. Tanto un bando (el nuestro) como el contrario (nuestros enemigos). El tener a la gente enfrentada en dos bandos siempre es fundamental para mantenerse en el poder carcajeándose de ambos

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