Ayer nos levantamos con el
pueblo cubierto por una capa amarilla. Coches, aceras, contenedores de la
basura, todo lo que estaba expuesto a la intemperie cubierto por esta curiosa
costra amarilla. El panorama era entre curioso y mosqueante, sobre todo por el
color amarillento azufre del polvillo
Inmediatamente pensamos en
lo probable. ¿Quizás un escape de
hexafluoruro de uranio de una centro clandestino de enriquecimiento de uranio?¿Un
escape tóxico tipo al drama que se vivió en Bhopal?¿O quizá se asemejaba al
veneno asesino de la dioxina, como ocurrió en Seveso?
Ya imaginábamos a las tropas del
Ejército Español con sus trajes NBQ (lucha nuclear, biológica o química) y todo
el pueblo de Peralta Monumental sometido a una dura cuarentena. Los vecinos
luchando entre nosotros por un poco de arroz. El pueblo cercado con alambradas
de concertina más altas y más cortantes que las de las frontera melillense.
Y todo ello sometido a un
estricto control de la prensa para evitar filtraciones y que se produjera el
pánico en todo el país. Qué digo país, Europa. Los habitantes poco a poco
mutando y volviéndonos más feos y voraces que los de walking dead. Y unos pocos
supervivientes en las casas baratas encerrados en el sótano del centro de
salud, llorando y aterrados ante la catástrofe
Pues no. No parece que sea tan
grave. El polvillo es polen de los pinos. Anteanoche tocó particularmente
ventosa y arrastró gran cantidad de este polvillo. Yo mismo en mi mismidad me
subí ayer por la tarde al monte y grabé
un pequeño video frotando con mis delicados dedos los brotes del pino. Podéis
apreciar como se desprende el polvillo y queda en mis sutiles yemas adherido.
Es cierto que nadie recuerda haber visto algo semejante antes, pero bueno,
acordaos que la memoria siempre nos juega malas pasadas. El hecho de que no nos
acordemos no quiere decir ni que no haya ocurrido ni que no nos haya pasado
Y os pongo un par de fotos de
unas zonas con barro, en la que se ve la mancha amarillenta que ha quedado
Así que tranquilos, no vamos a
vivir ningún apocalipsis químico. Las trompetas del apocalipsis quedan para más
adelante.
Y ahora en serio. Ojo con los
desastres en industrias químicas. Cuando ocurre algo en una nuclear ocupa
minutos y horas de telediario. En las químicas, menos minutos y mucho silencio.
Con todos mis respetos y
condolencias hacia los desastres de Bhopal y Seveso. Ninguna broma con estas
cosas
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