El proyecto de EDER habla de una
cierta sostenibilidad en la gestión de los pinares. O sea, que con la
germinación se puedan mantener por sí solos. Interesante, muy interesante
Fijémonos en qué está ocurriendo
en la zona del incendio.
Tras un incendio en un pinar se
produce una germinación brutal. Todas las piñas expulsan los piñones a la vez y
en el plazo de tres o cuatro años pasa lo que estamos viendo, una explosión de
vida de pinitos
Pero amigüitos, nuestro yesífero
y duro monte es lo que es y da de sí lo que da. Sí que se está produciendo una
germinación muy alta, pero sólo en los barrancos. En los cogotes y cabezos,
nada de nada
Otro motivo más para poner en
tela de juicio el proyecto de EDER. Tenemos un ejemplo bien claro de que hay
zonas en las que la regeneración natural no se da. Si fallan las premisas del
proyecto ¿Qué se puede esperar de la puesta en marcha del mismo?
La base de la todas las ciencias
es la observación y la experimentación. Si observamos el experimento que la
propia naturaleza está haciendo en nuestro monte tras el incendio podemos
deducir que los pinares son difícilmente sostenibles en todo su conjunto.
Quizás ciertas zonas puedas serlo y regenerarse por semilla, pero mucho me temo
que estas zonas van a ser únicamente los barrancos. Fuera de esto no. En estas
zonas únicamente podemos soñar con aclarar y que se repueble el monte de las arbustivas
autóctonas. El pino, no va a ser sostenible
Lo que os digo amigüitos. Cada
día me creo menos ese proyecto. Y cada día pongo más en tela de juicio el cómo
se está desarrollando el mismo
Observar, la clave de toda
ciencia
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