Evidentemente, es más barata. Es
el primer motivo.
Siempre los políticos están
pendientes de ver cuál es la tendencia que lleva la sociedad para, aunque sea a
codazos, abrirse paso hasta colocarse los primeros en la manifestación y portar
pancarta. Aunque hasta ayer ni supieran ni les importara nada acerca del tema
del que hoy son portavoces. La naturaleza y todo lo que ella conlleva es uno de
estos asuntos. Si está de moda “lo verde”, pues yo soy el más verde de todos.
De toda la vida. Vamos, que mi apellido por parte paterno es grin y por parte
de mi mamá es pis. Soy fulano grin pis. El más ecologista de la manifestación.
Siempre y cuando me reporte foto y voto. Aún me duele el estómago del discurso
zapateril en la ONU cuando habló del viento y del jefe cherokee.
Hasta hace pocos años se
subvencionaba la instalación de calderas de biomasa frente a las que quemaban
fósil. O sea, leña frente a gasoil o gas. El combustible podía ser hueso de
oliva, cáscara de nuez o el compacto este de madera prensada, el pellet. Ahh,
que esta moda es a nivel europeo, no os penséis que es cosa de Iberia.
Llegó la crisis y se quitó la
subvención. Pero la gente sigue haciendo sus números y les salen las cuentas,
el pellet es rentable. Y veo tanto a particulares como a empresas cambiando sus
generadores de calor a biomasa.
Yo voy a apuntar alguna ventaja
más que le veo a la biomasa, aparte del precio. Este combustible genera puestos de trabajo en
nuestro país. Una pequeña empresa que se monte en Lerín o en Roncal para hacer
este prensado de madera crea riqueza en la zona, y manos que antes estaban
paradas ahora trabajan y cotizan. Además se contribuye a mantener el monte
limpio. Esto reduce el riesgo de incendio y a medio plazo puede cambiar el
paisaje. Y generar otro tipo de turismo en la zona. Pero esto como yo os digo,
es a medio plazo.
Todo ventajas. Y encima el
dinero de la factura del pellet se queda en Lerín o Roncal. No va a Arabia, a
Noruega o a Rusia.
Pero va y resulta que la
administración empieza a echar cuentas. Y se dan cuenta que la recaudación por
el impuesto de hidrocarburos baja al bajar el consumo de gas y gasoil. Argggg,
problemón. ¿Cómo hago yo para suplir estoooo?, porque claro, de bajar gastos
administrativos cero. Hay que mantener la recaudación como sea
Me juego un café a que dentro de
poco empezarán a hablar de las emisiones de CO2 a la atmósfera del pellet y le
meterán un impuesto. O como han hecho ya en París y en Atenas, decir que contamina
mucho y directamente prohibir las calderas de biomasa. A no ser que sea una
biomasa certificada (certificada por mí, está claro) y más cara e impuestada (palabreja mía, os dejo
usarla)
Lo de siempre. Volver loco y
esquilmar al personal. Ahhh, por cierto. Ha aumentado mucho la demanda de
pellet. ¿Sabéis qué está haciendo España? Noooo, no estamos creando empresas
para hacer pellet y tener el monte limpio nooooo. Estamos importando pellet de
EEUU.
Disculpadme, me voy a vomitar
No hay comentarios:
Publicar un comentario