La verdad es que este país
parece las famosas viñetas del gran Francisco Ibañez. Somos 13 rue del Percebe
total
He recopilado unas cuantas crónicas
periodísticas estos días. La primera hace referencia a un ciclista que fue
multado por ir comiéndose un croissant cuando iba en la bici:
Por esta regla de tres ¿estará
también prohibido beber del bidón de agua? ¿Se multarán a todos los ciclistas
del pelotón cada vez que tomen una barrita energética? Si no pagan la multa
¿Será la responsabilidad subsidiaria para el patrocinador?
La verdad que es una buena forma
de recaudar
Esta también es chusca chusca:
No sé si conocéis el
establecimiento. Se trata del restaurante “La cueva de Luis Candelas”, a la salida
de la Plaza Mayor de Madrid. Es un sitio con solera, y si os apetece una comida
tradicional es una buena elección. A la entrada hay un portero vestido como el
Algarrobo, el de la serie “Curro Jiménez”, con navaja albaceteña al cinto y
trabuco de principios del siglo XIX al hombro. Pues resulta que pasa una pareja
de la Policía Municipal de Madrid y van a pedirle los papeles y la guía del
pistolón. La descripción que hace el bandolero es para morirse, cuando narra cómo
los municipales fueron hacia él poniéndose los chalecos antibalas. Pero el buen
hombre se negó a ser desarmado. Eso sí, al otro día fueron con semejante arma
de tecnología puntera al cuartel de la guardia civil a exponer el caso. Supongo
que el agente que los atendió aun estará muerto de risa
Y esta es para echar a correr.
Resulta que el propietario de un flamante lamborghini Gallardo es detenido por
supuesta conducción temeraria. Se le requisa el vehículo. Y mientras que si
sale el juicio o no sale, que si corrías mucho o no, alguien del depósito de
vehículos se equivoca y manda al lambo al desguace. Cuando el propietario gana
el recurso y reclama que se le devuelva el auto, me imagino la cara que pondría
cuando le entregan un bonito cubito metálico achatarrado. Eso sí, la indemnización
a pagarla a escote entre todos los vecinos de Granada
La verdad es que más vale que
Doña Ángel Merckel no lea estas noticias, que si no ni rescate ni ostias.
Directamente nos manda a hacer gárgaras de la unión europea.
Qué país amigüitos. La verdad es
que no sabes si echar a correr o qué, porque risa da un rato.
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