Pues ahí tenéis al Oscar en plan jotero en su nuevo sueño. Este año toca pelear defendiendo la camiseta de un club histórico como es el Racing de Santander.
Me alegré mucho cuando me dijo que se iba a ese club. Es una buena elección si tienes un tío gorrón en la familia como soy yo. Una bonita ciudad, con mar, con monte, con montaña, con buena gastronomía, a pocos kilómetros de aquí...... perfecto para ir tres o cuatro meses allá con la sana intención de no pagar nada y comer mucho a costa del sobrino. Y evidentemente no hacer la cama ni pasar la mopa por el piso.
Pues a luchar duro y a entrenar, que es lo suyo. Esperemos un fantástico año para Óscar, que se lo merece.
La verdad es que somos como dos gotas de agua, tanto en el tema deportivo como en el carácter.
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