Es curioso el espectáculo que están dando líderes y lideresas del mundo estos días en París a cuenta del cambio climático antropogénico. Ahí están tirándose los trastos a la cabeza unos a otros. Unos acusando a China de que son unos marranos poniendo todo perdido de CO2 y de óxídos nitrosos con sus centrales térmicas de carbón. Los chinos diciendo que vaya cojones que tenemos de decirles nada cuando el primer mundo hacer ya siglos que deforestó sus bosques
Pero todos lo que hablan tienen algo en común. Que no saben de lo que están hablando. El IPCC, el Panel Intergubernamental sobre el Cambio Climático, en su informe anual hace un "resumen para políticos", o sea, una versión condensada como las que hacía el Reader´s Digest para que los gobernantes no tengan que leerse todo el tostón. Y para explicarlo con palabras que puedan entender.
En resumidas cuentas, que los que legislan acerca de lo que tenemos que hacer en las próximas décadas no tienen ni idea de lo que están hablando. Pero tampoco dejan a los verdaderos expertos que aporten o legislen ellos.
En esto del cambio climático hay mucho consenso en el porqué, aunque no al 100%. En lo que casi nadie se pone de acuerdo es en las soluciones que hay que aportar. Emitir menos, eso sí, pero ¿Cómo se hace en una mundo cada vez más poblado y con cada vez más demanda? Por que no nos olvidemos que el 20% consumimos el 80% de la energía. Ahorremos, dicen algunos. Sí, estoy de acuerdo. Pero si nosotros reducimos un 50% lo que consumimos y se "lo mandamos" al resto, tocan a un 10% más. Está claro que hay que hacer más energía, y energía de la que no contamine
Pero ¿Cómo? La hidroeléctrica está agotada, donde puede haber un pantano ya hay un pantano. La eólica también está muy consumida, se puede mejorar en mayor rendimiento de las turbinas, pero el margen de mejora cada vez es menor. La fotovoltaica sí que tiene mucho camino por recorrer y ahí sí que hay que invertir. Pero las renovables aparte de renovables son intermitentes, esto es, no se puede contar con ellas todo el tiempo. Y por mucho que os vendan la moto de la batería de Tesla, eso no es la panacea ni mucho menos
Si hacéis cuentas, que yo aquí no os voy a aburrir con eso, veréis que una familia en España necesita entre 80 y 100 m2 de tejado para instalar placas para su autoconsumo. Evidentemente en una vivienda unifamiliar se puede hacer, hay tejado. Pero en un bloque de viviendas ya los números no salen. Así que la solución tiene que venir por la mejora en el rendimiento de las placas, por un sistema de almacenamiento de energía que a fecha de hoy no hay y posiblemente por cambiar el modelo de ciudad, yendo aún a mayores extensiones y no a edificar en altura. Algo que va en contra de la tan manida sostenibilidad, ya que suelo hay el que hay y si lo llenamos de chalets nos quedamos sin el
Hay una energía que a nuestros mandamases les pone los pelos de punta. La nuclear. Hay otro margen de mejora tremendo, de hecho las centrales que se construyen en la actualidad son idénticas en cuanto a diseño a las que se hacían en los años cincuenta. Sí, digitalizadas, computerizadas, con mejores medidas de control.... pero como lo que se diseñó para hacer mover los submarinos nucleares de los años cincuenta. Vamos, que seguimos haciendo submarinos de hace sesenta años.
Nuestros políticos en vez de plantear debates serios e informar a los ciudadanos hacen como las avestruces asustadas, levantar polvo y crear confusión. El tema de los residuos nucleares tiene solución teórica, otra cosa es llevarla a cabo. Ahí entra la investigación
El tema de seguridad también puede estar resuelto. Otra cosa es que se autorizara una central como es Fuckusima en una zona que ya había sufrido tsunamis.
Y el tema de que se acabe el uranio 235 también está resuelto con los modelos de centrales criadero o el ciclo del torio.
Todo está resuelto, en teoría, hay que mejorarlo y seguir investigando
¿Mi apuesta? Pues me voy a mojar. Un futuro con energía renovable (hidro, solar y eólica) y nuclear. Por ahí irán los tiros si queremos prescindir del combustible fósil. O eso, o volver a la edad media, que a mí francamente no me apetece estos días.
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