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Música

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martes, 4 de octubre de 2016

Un juguete, una ilusión.

Música de hoy, Blackmore´s Night "Child in time". Curiosa versión






Este año que viene a ver si salgo por ahí de viaje, que ya va tocando. Lo que pasa es que los sitios que me apetece ver o están en guerra o casi lo están. O tienen alguna plaga de alguna enfermedad que los hace poco recomendables de visitar. Pero si algo he aprendido de todos los viajes que he hecho es que lo que cambia siempre es el paisaje y lo que cambia menos es el paisanaje. La verdad es que la gente se parece mucho entre ellos. Son diferentes formas de vivir pero la forma de pensar y las aspiraciones y anhelos personales son los mismos en todo el mundo

Vamos, que lo que la gente quiere es vivir tranquilo y bien

Eso sí, lo que sí se parecen mucho más que los grandes son los peques. Los críos esos sí que son iguales en todo el mundo. Las mismas ganas de dar la murga, alborotar y sobre todo, de jugar. Lo que un crío quiere es eso, jugar y que juegues con el.

Ahora llegan las navidades y supongo que empezarán los anuncios de colonias, de turrones y de juguetes. Realmente el inicio de esa fiesta de invierno viene los dichosos anuncios esos. Y empieza la lista de los críos con eso de 

"Quiero esto, y esto y lo de más allá..."

Es lo que estamos acostumbrados en nuestro bien alimentado primer mundo. La lista de los juguetes.

También en nuestro primer mundo se está instalando el mensaje de que los juguetes no tienen que ser sexistas, que hay que regalar lo mismo a las niñas que a los niños. Y que los regalos no tienen que ser belicistas, nada de simulacros de armas ni cosas de esas. Bueno, son dos tendencias que ahí están y son muy respetables

Eso sí, lo que yo os puedo contar de mis viajes es que siempre he visto a los críos jugando a coches y camiones o a policías y ladrones mientras que a las niñas siempre se las ve con una muñeca en brazos. Vas por el segundo y tercer mundo y es lo que ves, que es lo que hay. 

Peroooo.... ¿Qué puedes ver en un país en guerra? Pues en un sitio donde las personas han perdido la humanidad, donde no existe seguridad y donde la vida no vale nada, puede parecer que no hay sitio para juegos; pero no es así. Los niños siguen siendo niños y entre bombardeo y bombardeo, siguen jugando.

Como siempre fuera de unos pocos sitios del mundo la mujer es la gran perdedora, hasta en esto. Un niño en Siria con un palo puede jugar a soldados. O con una caja y una cuerda que coge de un montón de escombros se fabrica un coche, un camión o un tanque; lo que proceda.

Sin embargo una niña lo tiene más complicado para hacerse una muñeca. Bien, vale, puede coger cualquier cosa, envolverla en harapos y pensar que es una muñeca, jugar como si fuera una muñeca pero..... no es su muñeca. En una guerra todo el mundo pierde, pero los grandes perdedores son los niños y entre ellos, las niñas. Son las mayores víctimas de cualquier conflicto

Ahora hay una ONG que se dedica a algo tan sencillo como recoger muñecas y mandarlas a países en guerra y a campos de refugiados. Para una niña allá  tener una muñeca es un pequeño vínculo con la normalidad, con la paz y con la niñez que tenía. 

El motivo de la entrada de hoy es este. Contaros de la existencia de esta ONG y pediros que si tenéis muñecas en casa que vuestros peques no usen, les podéis dar otro uso y esperanza a alguna pequeña en Aleppo o en cualquier otro andurrial.

Es fácil

El punto de recogida es la tienda de mi amiga Elena, la tienda de "Lola, Lolita, Lola". Vosotros cogéis vuestra muñeca, la lleváis allá y..... ya está. La ONG con la que Elena colabora recogerá todas las muñecas y se encargará del transporte. Allá voluntarios locales las reparten entre las pequeñas 

Por si no sabéis, os pongo plano


Sí que os digo una cosa. Se trata de recoger muñecas en buen estado, no es un "punto limpio" para deshacerse de juguetes viejos. Lo que mandemos que tenga un mínimo de dignidad

Y que no se os olvide esto que os digo. Os puede parecer una ñoñería o una estupidez. Pero para una chiquilla en Siria tener una muñeca a su lado es un vínculo con la normalidad. Y con la paz.

Llevad vuestras muñecas amigüitos y amigüitas. En este caso, un juguete son dos ilusiones; una la que proporcionó a vuestros hijos y otra la que puede proporcionar a otra niña


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