Os pongo un fragmento que no es de mi cosecha.
Ya quisiera yo redactar así.
"Los
dos partidos que se han concordado para turnarse pacíficamente en el Poder son
dos manadas de hombres que no aspiran más que a pastar en el presupuesto.
Carecen de ideales, ningún fin elevado los mueve; no mejorarán en lo más mínimo
las condiciones de vida de esta infeliz raza, pobrísima y analfabeta. Pasarán
unos tras otros dejando todo como hoy se halla, y llevarán a España a un estado
de consunción que, de fijo, ha de acabar en muerte. No acometerán ni el
problema religioso, ni el económico, ni el educativo; no harán más que
burocracia pura, caciquismo, estéril trabajo de recomendaciones, favores a los
amigotes, legislar sin ninguna eficacia práctica, y adelante con los
farolitos... Si nada se puede esperar de las turbas monárquicas, tampoco
debemos tener fe en la grey revolucionaria (...) No creo ni en los
revolucionarios de nuevo cuño ni en los antediluvianos (...) La España que
aspira a un cambio radical y violento de la política se está quedando, a mi
entender, tan anémica como la otra. Han de pasar años, tal vez lustros, antes
de que este Régimen, atacado de tuberculosis étnica, sea sustituido por otro
que traiga nueva sangre y nuevos focos de lumbre mental".
Bufff, que real y…. actual ¿No?
Pues no; es real pero no actual. Fue
escrito por Benito Pérez Galdós en 1.912. Ya veis, ha pasado un siglo y
seguimos igual. Es cierto que el señor Pérez Galdós fue un gran visionario y,
desde mi punto de vista, el mejor novelista en lengua española. Por encima de
Cervantes. Y con una producción literaria que no sé como tuvo tiempo de
hacerla.
Decimos que Julio Verne fue un escritor
que se adelantó al futuro. Galdós sí que lo hizo
Y es un reflejo de cómo somos
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