El otro día os conté el paseito ese que me dí por la zona de mejora del hábitat del visón e hice referencia a la película de Drácula y la frase de "la sangre es vida" mutada a "el agua es vida".
Siempre lo ha sido y siempre ha condicionado la vida de los humanos. Tanto a pequeña escala y devenir diario como en grandes etapas como pueden ser los siglos.
Recurriendo a la magnífica herramienta histórica que es geacron, os pongo estos mapas de España. No están completos, falta Peralta Monumental, pero bueno, los aceptamos aunque ya he transmitido mi malestar a los propietarios de la web. El primero es de 1.118, Zaragoza todavía estaba en manos musulmanas, pero lo curioso es ver por donde andaba ya el otro frente, el de la zona de Castilla. Ya rozaba Andalucía. Curioso ¿no? ¿a qué atribuimos esto?
Podemos pensar que los castellanos eran más bravos que los aragoneses, pero conociendo de la pasta que están hechos cada uno, hay que descartar esta teoría. También a que Castilla estuviera más poblada que Aragón y que dispusiera de más tropas, pero si vemos los censos poblacionales vemos que no es así. ¿Qué es pues?
La diferencia no viene del lado de aquí si no del de allá. Simplemente que los musulmanes presentaban lucha sin cuartel por defender las vegas fértiles del Ebro y sin embargo los páramos castellanos se las traían al fresco.
No penséis que durante los ochocientos años de reconquista todo fueron hazañas bélicas. Fue más bien un periodo en el que hay que hablar de colonización y presuras más que de grandes batallas. Que se dieron, pero como os digo fue mas en el lado aragonés que en el castellano. De hecho Zaragoza cayó en 1.119 y tras varios años de asedio por parte de Alfonso I de Aragón, de sobrenombre el Batallador. Este el es plan de la Península Ibérica en 1.118. Está el reino de Castilla, el de Aragón (en ese momento Aragón y Pamplona eran del mismo) la Marca Hispánica creación de Carlomago siglos atrás y el territorio musulmán.
Y este en 1.215, un siglo después y tras la batalla de las Navas de Tolosa. Como veis el frente en la zona aragonesa apenas se ha movido y sin embargo por parte castellana ya están en la actual Jaén. Anda que no defendían con ganas las huertas del Ebro los musulmanes. Lógico, era vida, comercio e industria lo que allí había; sin embargo en el raso palentino pues no hay mas que matojos y polvo.
Como os digo, los ríos son vida y son historia.
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