miércoles, 3 de agosto de 2016

¿Buena o mala suerte? Los hay cenizos

Música de hoy, Eric Church "Lightning"




¿Qué posibilidades tiene una persona de que le toque la lotería? Hombre, a un rancio como yo que no juega, ninguna. Pero la verdad es que muy poquitas. ¿Y de que le toque dos veces? Uffff, infinitamente menos. ¿Y tres, o cuatro, o cinco, o.....? Pues o eres un lavador de dinero corrupto o vete olvidando de eso

Pero es que hay gente que le ha tocado algo siete veces. Os voy a hablar de Roy Cleveland Sullivan, de profesión guardabosques en EEUU, un profesión bonita ¿no?

Dicen que caen en el mundo unos ocho millones de rayos al año. Si somos siete mil millones, pues la posibilidad de que te alcance uno es 8 millones entre siete mil millones. Una miseria. Pero la posibilidad de que te alcance el segundo es dividir otra por siete mil millones y así sucesivamente hasta.... un número despreciable. Pues aún así, siete veces que es el número de rayos que alcanzaron a nuestro buen amigo Roy a lo largo de su vida. Esa afición de la naturaleza por alcanzar al pobre Roy hizo que se mereciera el sobrenombre de "el pararrayos humano" y que obtuviera el honor de figurar en el Guinnes de los Records. 

Siete veces como siete soles le pegaron los rayos a Roy.

El pobre hombre desarrolló un miedo patológico a las tormentas y cada vez que se desataba una, corría a esconderse en el sitio más profundo que pillaba. Y aún así ya veis, siete latigazos que se ganó en su vida

Os preguntaréis que de qué murió. Pues por su propia mano amigüitos. Roy se descerrajó un tiro por un desengaño amoroso. Murió víctima del plomo, no de la electricidad.

Los hay con mala suerte. Bueno, o buena, según se mire, por que que te alcancen siete rayos y vivir para contarlo tiene tela

Os presento a Roy, con su sombrero agujereado por un rayo



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