Realmente lo de los viajes en el tiempo es algo mas habitual de los que os parece amigüitos. Primero en el sentido poético, a diario viajamos en el tiempo simplemente con nuestros recuerdos. Y luego en sentido real, basta elevar la mirada hacia el cielo para viajar en el tiempo. El sol que vemos es es sol que era hace ocho minutos, y si miramos hacia Alfa Centauri, un estrella que está aquí al lado, la vemos tal y como era hace cuatro años. El viaje en el tiempo es cotidiano y habitual
Estos días nos hemos desayunado con eso de las ondas gravitacionales. Veíamos a científicos de estos que tienen cara de estar todo el día en el bar haciendo locuras con lo ojos desencajado ante semejante descubrimiento. Y nosotros, los mortales comunes, los miramos con ojos de vaca que ve pasar el tren sin entender el motivo de semejante alborozo.
No es objeto de este blog explicar esto (luego os dejo un enlace en el que se explica de una forma más o menos amena e inteligible), pero sabed que sí que es un gran descubrimiento. Primero por que corrobora de modo experimental lo que la Teoría de la Relatividad predice. Y segundo por que nos va a permitir cotorrear y hacer de vieja del visillo dentro de un sitio que jamás nadie ha mirado:
Los agujeros negros
Y a más y a más, el análisis de las ondas gravitacionales nos va a permitir ir a más en el conocimiento del origen del universo. Bueno, realmente el verbo no es "ver" si no "oir", vamos a "oir" los orígenes del universo
Todo un gran paso
Os dejo un enlace a uno que explica las cosas de tal forma que se entienden
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