viernes, 29 de enero de 2016

"El trabajo os hará libres"

Música de hoy "La misión", de Ennio Morricone




Todos los 27 de enero es el aniversario de la liberación por las tropas soviéticas del campo de concentración de Auschwithz. Una fecha que es un baldón para todos los seres humanos

La palabra "genocidio" se utiliza con ligereza. El término jurídico se acuñó tras la IIWW para juzgar los crímenes cometidos por los nazis. En esencia es matar a alguien por su nacimiento o ideas. O sea, que no hace falta que hayas cometido un delito, el mero hecho de nacer en una etnia determinada o tener según que ideas ya te hace merecedor de que te mande al otro barrio. Así les ocurrió a judíos, gitanos, ucranianos..... homosexuales..... comunistas..... Lo que ocurre es que este "delito" está tipificado desde esa IIWW en adelante. Lo que ocurrió con el pueblo armenio y con los san namibios no se reconoce como tal, no pasa de ser "un incidente menor". Hace falta cinismo y cara dura.

Bueno, a lo que estamos. Al genocidio "moderno"

Se barajan cifras en torno a los cuatro o cinco millones de personas los que fallecieron en esos campos de exterminio. Que ya es. Hay personas que citan que "el comunismo ha matado a cien millones de personas". La verdad es que a las cifras cada uno las utiliza como quiere. Víctimas del "gran salto adelante" en China, de las purgas estalinistas en los Gulags, de la delación en países como Corea del Norte o Cuba...... hay muchas. No se si cien, cincuenta o tres. No sé la cifra y creo que francamente nadie la sabe

Pero una máquina de exterminio como la que montó el partido nazi en Alemania no la ha habido. Con su contabilidad, su control de costos, su I+D para mejora de procesos, su organigrama....  en resumen, su perfecta organización. Costaba imaginar que algo así se pudiera dar, de hecho cuando las tropas de la 101 aerotransportada americana se dieron de bruces con un campo de concentración no podían creer lo que veían. Fue Patton el que cogió a los vecinos de un pueblo alemán vecino y los llevó al campo para que vieran eso. Las crónicas cuentan que los vecinos miraban atónitos, asombrados y aterrados eso. Que la mayoría no sabían que ocurría a escasos kilómetros de sus casas

Ahora bien, como esa perfección y como esa premeditación tan perfecta en el asesinato, a ese nivel nunca se había llegado y nunca, por fortuna, se ha repetido. Calcular el coste que cada muerto tenía e intentar bajar esa cifra, eso no se ha vuelto a ocurrir

La verdad es que el ser humano cuando quiere es un pozo de maldad. 

Ahhh, y ya veis que eso está a la vuelta de la historia, que hace poco más de setenta años que esos campos fueron liberados



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