lunes, 14 de abril de 2014

500.000 puestos de trabajo a la mierda


Pues sí, esa es la cifra. Con la nueva reforma del sistema tarifario eléctrico, esa es la cantidad de personas que o han dejado de trabajar o no lo van a hacer. El interés gubernamental por proteger y blindar a las compañías eléctricas frente al consumidor ha ganado. Y usted no va a poder ponerse su plaquita fotovoltaica o su aerogenerador para su  consumo propio so pena de tener que pagar un canon que lo hace inviable. Así están las cosas. Todo sea por la pasta y por el pesebre
Pero como siempre, no se pueden poner puertas al campo y lo inevitable llegará. Y como siempre, será la vieja Península Ibérica la última del continente en apuntarse al carro, pero llegará.
Siempre a la cola de todo. Hicimos los últimos la revolución industrial, la época de la ilustración casi no llega y sólo fue para rozarnos, el antiguo régimen por poco no cae, el último país de este lado de Europa en ser democrático…. los últimos en todo. De todas formas no echemos la culpa a los que nos gobiernan. Son solo un mero reflejo de lo que somos todos.
Pues eso, que con esta “reforma” eléctrica lo único que han reformado es un blindaje mayor de las compañías frente a los usuarios del contador. Ahhh, por si os interesan cifras. “Aislarse” del sistema eléctrico, o sea, una casa que no necesite del contador, hoy necesita treinta mil euros de inversión. Inviable. Si la reforma hubiera sido otra, con dieciocho mil estaría hecho. Y lo que siempre os digo amigüitos, con un poco más de dinero para investigación en vez de subvencionar cacharros obsoletos, las cifras bajan que es un primor
Pero los tiros no van por ahí por el resto de Europa. Y como siempre la razón se impondrá al cojonudismo unamuniano. Tarde, pero se impondrá.
España y los españoles siempre a la cola de todo. Siempre los últimos. Aquí el grito de “viva lo peor” y “vivan las caenas” sigue vigente. Ahhh, y que conste que cuando digo lo de España incluyo a toda la península, País Vasco, Navarra y Cataluña también. Que por mucho que esos politiquillos creanaciones de nuevo cuño saquen pecho, estas tres comunidades autónomas, junto con Valencia, fueron las que más murga dieron en las guerras carlistas en defensa del viejo régimen frente a los nuevos aires de libertad.
Somos el hazmerreir de Europa, que es el hazmerreir del mundo.

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