miércoles, 18 de diciembre de 2013

Los mayores pedos en la historia de la tierra

Bueno, pedos, pedos…. explosiones volcánicas; pero lo de pedos como que es mas de aquí.

Hay veces que no nos damos cuenta de lo delicada de la existencia de la vida en la tierra. Siempre pensamos en el asteroide, en los extraterrestres, en los virus… en cositas de estas que pueden remolacharnos la vida. Pero si fuésemos conscientes de que vivimos sobre un horno abrasador y solo separados por un estrecho aislante incluiríamos el achicharramiento como una de las causas a evitar

Ha habido grandes explosiones volcánicas. De hecho las primeras fueron cuando la tierra era un bolo de hielo en su temprana edad de 700 millones de años. Fue la primera y más grande glaciación y gracias a los volcanes se liberó suficiente CO2 como para crear un efecto invernadero y descongelar el planeta. Como os digo, la tierra era un pedazo de hielo en toda su superficie.

Y parece que está tan lejos, hace 3.500 millones de años. Pero lo cierto es que en los dos últimos siglos ha habido otros pedos, de considerable menos estruendo, pero no por ello menos espectaculares. En el siglo XIX ocurrió Krakatoa. La isla desapareció y la onda de choque dio dos vueltas a la tierra. Ese verano, no hubo verano por la cantidad de cenizas que se expulsó a la atmófera. No me extiendo más y os dejo un enlace


Ahora se está formando otro, que le llaman el “hijo de Krakatoa”. Más majico, nos come de bien, ya casi se anda.

Y la otra fue hace bien poco. El monte Santa Elena, en EEUU. No fue tan grande como Krakatoa pero el monte menguó en 400 metros de altura y 500 km cuadrados de bosques quedaron arrasados. Murieron 57 personas, la mayoría científicos y expedicionarios que estaban estudiando el monte en cuestión


Y aquí teneis la grabación, en vivo y en directo


Ahhh, y recordad que son estos poderosos mantos radioactivos del nucleo terrestre los que nos amenazan, pero también los que hacen posible que la vida se desarrolle en la tierra. Estos mantos metálicos fundidos, combinados con la rotación terrestre generan el campo magnético. Esto produce el cinturón de Van Allen que evita que el viento solar y los rayos cósmicos nos sometan a una sesión de radioterapia salvaje y mortal
Que curioso. Una gran amenaza y un escudo para la vida al mismo tiempo. Esta Navidad pedid a los Reyes para que el nucleo siga girando. Hay una película sobre eso, pero lo único que merece la pena de la peli es Hillary Swank (Slurpsss, slurpsss)

Pongo enlace a Hillary Swank (mueta mas maja, oye)

No hay comentarios:

Publicar un comentario