lunes, 18 de mayo de 2020

¿Todos los políticos son iguales?

Música de hoy, pues un poco de música africana. De la modelllna, "Africa"





Hace tiempo que no os cuento cositas de África y la noticia de la muerte de Anguita me viene al pelo. No por que Anguita fuera africano, cosa evidente, si no por que las redes se han llenado de glosas hacia su persona y su carisma. Y sobre todo un mensaje

"No todos son iguales"

Frase sobada y manida en con la cual cada uno de los incondicionales de un partido justifica su pertenencia a dicho partido

Antes de nada y dado que estamos entre amigüitos os diré mi opinión. Por supuesto que todos no son iguales. En España tenemos unos 160.000 cargos electos de los cuales la gran mayoría entiendo que son gente honrada. Otra cosa es su mayor o menor capacidad para desempeñar el cargo, de la cual y a la vista de la altura intelectual de la clase de hoy en día yo sí que dudo bastante. Francamente mejorable

Pero a nivel de honorabilidad creo que la mayoría no son corruptos. Os lo digo desde mi experiencia en la que he tratado con personas de un lado al otro del espectro político y jamás me he cruzado con nadie que me pidiera mordidas. Es mi experiencia. 

Así pues para mi como personas  en general son válidas y que como gestores pues dejan bastante que desear.

Os voy a contar una historia. Una historia africana. De esas que se cuentan al final de la jornada en la que has disfrutado como un enano del paisaje de sabana, del "veld", de los horizontes infinitos y de unos colores que hieren el ojo de intensos. Es la historia del primer presidente que tuvo Tanzania tras la descolonización. La historia de Julius Nyere

Cuando Londres hizo cuentas y vio que sus colonias le costaban mas dinero del que sacaba de ellas hizo el petate e hizo caso a los movimientos descolonizadores que soplaban por las llanuras africanas. Primero fue Botswana y luego otros paises quedaron fuera de la tutela de la graciosa de su Majestad. África recuperaba su independencia

Pero imaginad un continente donde un imperio expoliador como fue el británico se había dedicado durante decenas de años a llevarse  todo lo posible y a invertir cero libras. La población analfabeta. No había sanidad. No había seguridad. Ningún africano tenía el concepto de país, solo de tribu y grupo étnico. Y en medio de todo ese desbarajuste con Londres haciendo maletas unos pocos africanos con formación tuvieron que hacerse cargo del problema.

Los hubo de todo pelaje y condición. Gente honrada y auténticos déspotas. Julius Nyere fue de los primeros. El primer presidente de Tanzania. 

Julius era un tipo bragado. Estudió en Escocia y con su carrera bajo el brazo volvió a lo que era Tanganica a ejercer de profesor. La educación es libertad y bien lo sabía Julius. Total y para no aburrios os cuento que copió lo de Gandhi y consiguió la independencia. Copió y mejoró, que Gandhi era un puto racista pero eso no sale en el cuento.

Bueno, a lo que vamos que para eso hemos venido.

Julius y cuatro mas se vieron en la tesitura de gestionar un nuevo país en el que sus habitantes no tenían el concepto de país. Llevaba una ventaja, que como Botswana en la zona no había habido guerras tribales y el hecho de que abuelo no matara al mío es una ventaja para ponerse de acuerdo. Total que en 1960 el partido de Julius ganó unas elecciones y Julius fue presidente

¿Que hace falta para goberna? Pues dinero. Y Julius se rascó la cabeza a ver como demonios saco yo pasta para sacar adelante esto. 

Y fue la ONU la que le dio la idea. Tanzania es el paraíso en la tierra. Un lugar maravilloso, con una fauna como en ningún lugar del mundo. El Serengeti es un edén en la tierra, algo fuera de serie. Y en aquel momento era la meca de..... los cazadores. En los años 60 ya empezaba la moda de la conservación animal y alguien en la ONU "exigió" a Tanzania que controlara la caza. Está claro, es muy sencillo exigir a tu vecino que haga cosas cuando tú, habitante de EEUU o de Europa has acabado hasta con la última ardilla. 

El movimiento ese de marras que quería que Tanzania acabara con la caza cobró fuerza. Y a Julius se le encendió la bombilla. Pidió a la ONU dinero por controlar la caza y la ONU.... cedió. Ante la sorpresa mayúscula del propio Julius. Tanzania recibió dinero

Ahora bien, como carajo controlo yo un país inmenso sin Guardia Civil ni nada que se le parezca. Pues Julius y sus ministros dieron con el dos a cero. En Tanzania hay una etnia, los masais, que son ganaderos. Gente brava y que no se deja amilanar. Pues Julius les dio permiso a esta etnia para que su ganado pastara por toda Tanzania a cambio de que fueran los masais lo que se encargaran de acabar con el furtivismo

Mano de santo. Aparecieron unos cuantos cazadores muertos y se acabó el furtivo. Se seguía cazando, evidentemente, pero bajo control. Todos contentos, Julius y Tanzania con dinero, los masais pastoreando y con un coste cero fin de la caza furtiva

Pues con esa pasta que recibió de la ONU mas el dinero que sacaban primero de la caza legal y luego del turismo Tanzania despegó. No dejó de ser un país pobre, pero salieron de la miseria. Y sobre todo consiguió Julius su idea, que todo tanzano aprendiera a leer. Que no era poco la ingente tarea de montar escuelas por todo el país

Al lado de Tanzania está Uganda. Y allá estaba Idí Amín Dada, un puto sicópata. Como todo chalado que se precie de serlo cuando las cosas le fueron mal buscó el enemigo fuera y lo encontró en Tanzania. Total que invadió el país y..... salió trasquilado. Los tanzanos lucharon como fieras por defender su país y su forma de vida, hasta tal punto que el ejército tanzano rechazó a los ugandeses primero y luego fueron ellos los que contraatacaron, llegando hasta Kampala, capital de Uganda y deponiendo a Idí. Toma ya

Julius era un socialista, pero socialista con la impronta africana. No era marxista ni nada que se le parezca, era un tipo que soñaba con un mínimo de dignidad para toda persona, pero no era un déspota del calibre que el socialismo ha dado al mundo. Era un buen tipo. Expandió la sanidad y la educación por todo el país. Tanzania es muy fértil, y ayudado de las nuevas técnicas agrícolas logró erradicar el hambre primero y luego hacer de Tanzania un país exportador. 

En 1985 Julius dejó el cargo. Salió del palacio presidencial, cojió su bicicleta y volvió pedaleando a su aldea natal. Salió como llegó, en bicicleta.

Julius fue una personalidad muy respetada en África. En Tanzania se le conoce como "el maestro" y el "padre de la patria". Yo creo que fue algo mucho mas sencille. Un buen hombre que se vio con una tarea ingente frente a el y que en vez de escurrir el bulto asumió su tarea. Sabía que si quería que su querido país prosperara era él y unos pocos como él los que tenían que hacer la tarea

La hizo. Y una de sus últimas frases fue que sentía que solo había podido conseguir llevar a Tanzania de la miseria a la pobreza. Lo cierto es que a día de hoy Tanzania es el país mas seguro de África, con un buen nivel sanitario y educativo (salvando las distancias, claro está)

Y tras pasar por sus manos ingentes cantidades de dinero Julius se fue a casa...... en bici

No todos son iguales. Claro que no. Pero pocos son Julius

Había pensado hacer una exposición y una charla sobre mi último viaje, el de Etiopía. Pero dado que las cosas están como están empezaré una serie y os iré desgranando y contando dicho viaje, que dio mucho de sí

Bueno amigüitos, espero que estéis bien. Abrazos de lejos y que corra el aire

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