lunes, 26 de noviembre de 2018

Capítulo ducentésimo quincuagésimo: "Tiempo para el amor"

Música de hoy, "Amore", de los Petersellers. Putos gamberros están hechos


Foto del grupo. Raro en mí, yo sonriendo



Pues sí amigüitos sí. Un mes de viaje da para todo y esta vez no iba a ser diferente. En este viaje también hubo tiempo para el amor como os lo anuncio en el título

No puedo evitar una sonrisa socarrona cuando alguien me habla del Caribe y de sus gentes. Y normalmente se refieren a los caribeños con la frase esa de 

"Es que tienen otro concepto del sexo y de las relaciones"

Cuando oigo-leo esas palabras como os digo ladeo un poco el palillo, giro la cabeza y ofrezco mi mejor sonrisa. Con todos mis respetos hacia los caribeños, comparados con los africanos parecen personajes sacados de una novela victoriana del Reino Unido del siglo XIX.

En resumidas cuentas y en pocas palabras. Que son mas calientes que el cenicero de un bingo o que el flequillo de un churrero. Si os parece que en el Caribe "tienen otro concepto del......" pues en el África subsahariana eso es la leche. Es que vamos, eso de la "pareja estable" y demás les suena a algo raro, extraño e irrealizable.

A ver. Que todo el mundo está emparejado y estas parejas se forman de muy jóvenes. Que no es extraño que dos personas de diecipocos años ya estén "casados" y con críos correteando por las calles. Pero eso no es óbice para que fulano se líe con mengana y esta con zutano. Eso es así y está a la orden del día

Y tiene su sentido, desde un punto de vista etnológico. En un lugar donde las enfermedades se llevaban hasta hace poco por delante a un montón de personas sus gentes tienen que reaccionar así. El concepto de "familia" tal y como lo tenemos en Europa, allá no está. Está el concepto de "clan", en el que todo se comparte y todo es de todos. Es de puro sentido común. Si yo tengo dos gallinas y a ti se te ha muerto la tuya, yo te doy una. Y si solo tengo una, te doy un huevo. Y si no tengo mas que un huevo, sientate conmigo y nos lo comemos a medias.

Es así, y si no lo es, esa sociedad está llamada a desaparecer

De hecho es normal que haya en cada aldea la "big mama", una especie de abuela que se encarga de eso, de redistribuir lo que hay en dicha aldea para que nadie pase hambre. Y también se encarga de cuidar a los pillastres cuando sus padres están currando en el campo o cazando.

Por eso estoy enamorado de África. Por que cuando viajas allá, todo es diferente. La gente es diferente. Y hacen cosas diferentes

Así  que su concepto de pareja, sexo, relación y familia no tiene nada que ver con el nuestro. Ahhh, y eso sí que siempre os lo digo. Si vais por allá. no juzguéis. No entréis en el juego "mejor-peor" que lo nuestro. Es simplemente distinto

Pues en el viaje íbamos cinco personas non y una pareja. Y en los cinco días del Manambolo nuestras compañeras fueron ampliamente cortejadas por los caballeros que nos acompañaban. La verdad es que los tíos son resistentes para todo. Para remar, para cocinar, para trabajar y...... para el cortejo. Es que el sector joven de los remeros no conocía el desánimo en el tema del cortejo. Insistentes los chavales, vamos

Era para ver el espectáculo tras montar el campamento. Allá estaban ellos, incombustibles al desánimo, cantando bellas canciones de amor y tañendo sus laúdes a los pies de los torreones de nuestras compañeras de viaje. Y componiendo poemas que ríete tú de los de Garcilaso de la Vega. Todos unos galanes

Eso sí. Buena gente. En ningún momento hubo ninguna grosería. Iban a lo suyo, pica que te pica, pero sin pasarse

Por las noches y tras la cena había un rato de baile. Improvisaban una batería con los bidones vacíos del agua, tenían una pandereta y hala, a darle a la percusión. Y con eso, todos a bailar en torno a la hoguera. La verdad es que ojala hubiera venido con nosotros un notario, para dar fe que hasta yo lo intenté. Y hasta recibí aplausos.

Como os digo, en África todo es diferente. Es que hace falta valor, aplaudirme a mí. Por cierto, que el baile es algo así como "La conga", en el que todos bailamos al corro e imitamos los movimientos del que va delante. Así son las cosas

Pues eso. Los bailes consistían a veces en dar vueltas a la hoguera haciendo sentadillas. Y eso es un palizón, os lo aseguro. Pues tras la cuarta vuelta, me rendí y volví a mi sitio a sentarme frente al fuego. Una vuelta mas y una de mis compañeras de viaje vino a sentarse tras de mí.

Evidentemente parte del cortejo consiste en bailar con la dama. Y en cuanto una se sentaba, alguno de los remeros venía y galantemente la volvía a sacar a la pista

Pues esta vez mi amiga se puso tras mi espalda. O sea que a vista de pájaro estaba el fuego, estaba el corro de danzantes, estaba yo y escondida detrás de mí, mi compañera de viaje

"Hay Jesús. Que estoy rendida. Que no quiero bailar más. Que me va a dar algo. Que no tengo ni aire. Que qué paliza......... que no me apetece seguir bailando. Ay, que no quiero volver a bailar......"

Escasos segundos después de sentarse uno de nuestros remeros vino gentilmente a volverla a pedirle baile. Lo que pasa es que esta vez mi corpachón-osamenta estaba por medio

Yo miré desde abajo al remero con esta cara de pocos amigos que tengo. Alargué el brazo. Mostré la palma de la mano. Alcé el índice e hice el internacional gesto de 

"Noooooo"

Con un solo movimiento de brazo. O sea, que no hubo oscilación ida-vuelta. Solo hubo ida y la mirada de avinagrado esta que tengo desde abajo, que estaba sentado

El pobre hombre puso una cara triste, muy triste. Me miró unas décimas de segundo, se dio media vuelta y se retiró. Hasta me sentí mal. Y por si fuera poco, estalló una carcajada de mi compañera de viaje a mi espalda

"JAJAJAJAJA,  eso es decisión y mandar. Tenías que ver la cara que has puesto tú y la que ha puesto Helmsman...... JAJAJAJA"

Parece mentira, pero en África también funciona lo del "NO ES NO". Aunque esta vez fui yo el que recurrió a esa frase tan actual.

Pues no sé si fue casualidad o ya tocaba. El caso es que esa fue la última "pieza" que tocaron. Se ve que pensaron que si las blancas no bailaban, ya no merecía la pena seguir la fiesta

Mi "NOOOO" fue objeto de risas en lo que quedaba de viaje. Y nuestra guía nos dijo que todas las expediciones por el Manambolo eran iguales. Que siempre los remeros jóvenes estaban a lo mismo, a ligar con la blanca. Bueno, en España en los sesenta era así. La moda era "ligar con las suecas" o por lo menos, intentarlo.

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