viernes, 20 de junio de 2014

Espantado estoy de ver en manos de quien están nuestros impuestos (4)

Voy con la cuarta y dejo esto aparcado hasta saber algo nuevo (si entráis por primera vez en este blog, leed primero los artículos posteriores)

Un par de reflexiones cortitas, que hoy toca ya la juventud y tengo ganas de salir a sumergirme en la vorágine, la festividad y dar abrazos a diestro y siniestro

Hemos visto estos días el ejemplo de un millón de euros tirados por el váter en "nuestro tramo" del TAV en algo tan banal como es la grava para los terraplenes.

Si esto ocurre en la puerta de nuestra casa ¿Es con este criterio con el que se está haciendo el resto de la obra? Es que si es así, esto es para echarse a temblar.

No entro en si la obra hay que hacerla o no. Eso es personal y de cada uno, y supongo que argumentos los hay tanto a favor como en contra. Pero me temo si los criterios para decidir que el tren se haga son de la misma altura intelectual que los que se están empleando en la gestión de las obras, esto va a ser un pozo sin fondo para un sinsentido.

Hacer una obra para a los tres años demolerla, manda huevos. Ya lo dijo la insigne Carmen Calvo hace años

"Lo público no es de nadie"

Hace años me pusieron una comparación acerca de lo qué es España

"España es como un saco de aspillera, que por mucha agua que eches, nunca se llena. Pero habíamos llegado a un punto en que entraba tanta agua, que el saco casi se llenaba. Y en esto llegaron unos tipos, le metieron tres cortes al saco y ahora es cuando no va a haber forma de que se llene"

Pues nos va tocar reparar el saco entre todos. Esto no tiene remedio

¿Os acordáis del coste del Circuito de Navarra?¿O de la nueva terminal aeroportuaria?¿O del Guggenheim, a pocos km de aquí?

No hay remedio.

Hoy, fiesta. Pan y circo. No hace tanto de esto.

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