miércoles, 11 de septiembre de 2013

¿Por qué tanto interés en Siria?




En Siria hay dos ciudades que pugnan  entre ellas por ser los lugares habitados sin interrupción más antiguos del mundo. Damasco y Aleppo.

Ambas son los escenarios de sangrientos combates desde hace dos años y medio. Ya he puesto post anteriores acerca del porqué de muchas revueltas en Oriente Próximo y África, fundamentalmente la miseria que asola a sus clases más bajas. Llevan noventa mil muertos.

Realmente lo que estamos viviendo ahora es una nueva guerra fría. En los años cincuenta ocurrió en Europa y la protagonizaron la URSS y EEUU. Ahora es Rusia, EEUU y China y el escenario es Oriente Próximo.
En estos momentos gran parte de Europa es un rehén energético de Rusia. El gasoducto ruso que a través de Ucrania nutre a Polonia, Alemania y todos los países de la cuenca del Ruhr es una espada de Damocles. Con la energía nuclear en franco retroceso desde lo de Fuckushima, las renovables en mantillas y con cada vez menos dinero para I+D ese gasoducto se ha vuelto vital para el sostenimiento de Europa. Y tiene un dueño, Putin. 

Tanto Alemania como Polonia son conscientes de su vulnerabilidad y están tomando medidas a corto plazo. Están transformando centrales de ciclo combinado de gas en otras de carbón e inaugurando nuevas de este mismo combustible. Máquinas de 4.000 Mw, el equivalente a tres nucleares modernas. Tanto Alemania como Polonia tienen abundantes minas de carbón a cielo abierto y esto le procura cierta tranquilidad e independencia

Pero aun así es una solución cortoplacista y se está buscando una nueva vía. ¿Qué cual es?, sencillo amigos, un nuevo gasoducto directo desde Arabia hasta Europa a través de Jordania yyyyyy….. Siria. He aquí el interés en este árido, pedregoso y polvoriento lugar.


Siria fue en los años setenta la salida de la URSS al Mediterráneo y por ello el régimen del papá de Bachar Al Assad era mimado por el Soviet. Hoy se ha convertido en la clave para el futuro energético de Europa. A ningún gobierno le importan mucho los muertos en Siria, realmente el interés es exclusivamente geoestratégico. Si Rusia evita la construcción de ese gasoducto tendrá a Europa bajo sus pies. Si el régimen cae y se instala un gobierno títere de EEUU y consiguientemente de Europa, Obama se habrá apuntado un gran tanto en esta nueva guerra fría.

¿Os acordáis de la movida con el rescate de Chipre hace unos meses? Je je je. Lo que ocurrió fue que Rusia literalmente estaba comprando Chipre. Con esto conseguía otro tapón y obstaculizar la salida al mar del gasoducto de marras proyectado y de paso tener un portaviones perenne en el Mediterráneo. De ahí que la Unión Europea perdiera el culo en el rescate a Chipre y se lo cargara a los depósitos de los inversores extranjeros en Chipre. Que casualmente eran la mayoría rusos. Esa maniobra supuso un uno a cero en el partido entre la UE y Rusia, pero estos últimos se llevaron un considerable cabreo.

Veremos a ver qué pasa. Mientras Obama afila las uñas bajo el diploma al Premio Nobel de la Paz, Putin veta cualquier resolución de la inoperante ONU, China aplaude y corea este veto, la floja Europa silba y mira hacia otro lado esperando que le hagan el trabajo, el Papa tibiamente pide dialogo a dos bandos que se están asesinando desde hace tres años y son los civiles sirios los que mueren de cien en cien a diario.

Y todo por un tubo.

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