jueves, 21 de marzo de 2013

Capitulo vigesimo sexto "Grecia, a la vuelta"



Capitulo vigesimo sexto "Grecia, a la vuelta"

Yugoslavia para mi fue todo un descubrimiento. Un pais muy verde, con unos lagos espectaculares y una gran amalgama de culturas. Todos tenian dos cosas en comun: el odio por sus vecinos y que habia que matarlos. Así pasó.
Croatas, serbios, kosovares, macedonios, catolicos, musulmanes; todos buena gente, pero si nombrabas la provincia de al lado se ponian como fieras. Amén de que son un pueblo de gente guerrera que siempre han estado como un piojo entre dos uñas, tan pronto turcos como austriacos. Pero siempre en guerra y con la violencia a vueltas.

Bueno, a lo que vamos.
Volviamos de Grecia, ya habiamos dejado atrás kosovo y de nuevo por la costa croata, esta vez hacia arriba. Era verano y la gente se dirige a la playa. Como aquí colas inmensas de coches, pero alli todos son iguales y de las mismas marcas, yugo o zastava quiero recordar. Son identicos a los seiscientos y a los cientovienticuatros de aquí. Una retención tremenda y llegan los listos. Esta vez, los listos eramos nostros y a lomos de una magnífica BMW.
Nos ponemos a adelantar la caravana cuando un cochecito asoma un poco el morro. Sentí un golpe en el tobillo derecho, perdimos el equilibrio y nos fuimos barranco abajo.

Dicen que tu vida pasa por delante cuando estas a las puertas de la muerte. Lo que paso por delante mio fue un monton de matas y pedruscos. Frenamos contra un matojo. Yo me notaba bien

"tas bien"
"Si, pero, ahhhhh"
"QUE PASA OSTIA"
"Quemequemo con el escapeeeee. Se me está achicharando la piedddna"

Consigo levantar la moto y la verdad que la quemadura no tenia buena pinta. Bueno, me he puesto en pie pense. Di un paso y cojeaba "en fin, no he salido mal parado"

"Tu que tal"
"me duele el pecho. Creo que tengo alguna costilla movida"

Pues eso, menuda movida. Salgo del barranco, alcanzo la carretera y los propietarios del coche, una pareja joven, llorando. Nos explicaron que en Yugoslavia habian prohibido tener accidentes, y el que que no cumplia la ley, era multado. Encima. Bueno, el daño no era grave y nosotros estabamos bastante enteros. Los del coche suplicaban que no diesemos parte (la culpa habia sido nuestra), que les daba igual el bollo. Lo de la moto era cosa nuestra. Pero estamabamos mas tiraos que una zapatilla vieja.

Un señor maduro se dirige a nosotros y nos ofrece ir a su casa. Bueno, era la opcion mas inmediata. Se larga con su zastava y vuelve a la media hora con el zastava y un carro de los de mano atado atrás. Cargamos y atamos la moto y a su casa.

No explico que era cristiano y que su religion le obligaba a ayudar al necesitado (o sea, nosotros). Pero que estaba de acuerdo con que habia que matar a todos los serbiosy musulmanes cuanto antes. Joder con el samaritano.

Pero bueno, fuera de eso, con no nombrarle a los vecinos, el hombre y su familia fueron encantadores. Cenamos y se inició una charla, conmigo de interprete

"¿que dice?"
"que de donde somos"
"dile que somos vascos"
"................. argh, argh"
"Explicale la problematica del pueblo vasco"
"Yo no explico nada. Bastante mosqueo tienen ellos con sus historias como para venir con las nuestras"
"Pues ya le explico yo"

Y alli estaba mi compañero, con una libreta y un boli, dibujando el mapa de españa, navarra y el pais vasco. Y el croata mirando con una cara de aburrimiento que pa que.
Sobre el mapa, el croata nos indicó una carretera secundaria (que luego era un camino) para salir. Indico que por una frontera principal ibamos a tener problemas con la moto (el carenado estaba deshecho). A todo esto, mi amigo no podia subir y bajar de la moto sin ayuda. Y yo no sabia llevar la moto. Asi que yo cogia a mi amigo, lo subia a la moto y luego me montaba yo. Y al bajar al reves, lo tenia que apear yo. Todo un poema
Hicimos caso y salimos de Yugoslavia sin mayores problemas. Llegamos a Trieste e insisti en ir al hospital. Pero nada. Que tenia que llegar a la boda.
Dormimos en Venecia y al dia siguiente (era un miercoles), nos lanzamos a la autopista y nos llegamos hasta figueras de una tirada. Cinco veces repostamos y sin bajarnos de la moto por no hacer el circo que teniamos que montar.
Llegamos a Figueras de noche y entramos al camping. Una señora fregando en la pila del camping. Paramos a su lado, me bajo, cojo a mi amigo y lo bajo. La otra mirando. Nos quitamos los cascos (llevabamos bastante roña encima) y echamos a andar. Yo cojeando apoyado en mi amigo y el otro sujetandose el costado izquierdo y quejandose cada vez que respiraba.
La pobre señora con la boca abierta
"Hijos mios, si parece que venis de la guerra"

Ya casi en casa las cosas se ven de otra manera. Cenamos, muchas risas, cerveza y mas risas. Aun nos dio tiempo el viernes de visitar el museo dali y de ir a la playa. Y pa casa

Mi amigo llegó a la boda

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